Generalmente, cuando hablamos de minijardines, la persona que nos escucha pone cara de no entender muy bien a lo que nos referimos. Y es que, en España la minijardinería aún está por descubrir. La elaboración de minijardines y jardines de hadas llevan décadas en países como Estados Unidos. Pero es desde hace unos años, cuando su fama se está extendiendo por todo el mundo. Los minijardines y los jardines de hadas, aunque tienen muchas similitudes y suelen nombrarse indistintamente, no son exactamente lo mismo. Ambos pueden diseñarse en contenedores pequeños, ambos pueden contar con figuras, mobiliario y accesorios que enamoran, pero poseen una diferencia importante. Los minijardines siempre buscan un equilibrio en la escala de todo el conjunto, figuras, accesorios y por supuesto, las plantas. Pretenden ofrecer una visión en miniatura de un bosque o jardín real. Los jardines de hadas son la versión más libre y hippie de los minijardines, puesto que no se ciñen a escalas. Lo divertido de los jardines de hadas es que cualquier persona a la que le gusten las plantas, puede crear sus propios diseños sin muchos conocimientos previos. En ambos casos, el ingrediente imprescindible es la imaginación y la creatividad. Así que, tanto si eres de los que disfrutan controlando medidas, como si eres un espíritu libre…¡El mundo de los jardines en miniatura es lo tuyo!