Las fitonias proceden de los bosques tropicales de Brasil, Perú, Colombia y Ecuador. Se utilizan con fines ornamentales, por la belleza de sus hojas que supera con mucho a la de sus flores. Son plantas muy sencillas de cuidar. Tienen hojas durante todo el año y prefieren zonas de sombra con mucha humedad. No soportan temperaturas por debajo de los 15ºC, por lo que debemos mantenerla dentro de casa hasta que la temperatura exterior sea regular (junio aproximadamente). Cuando las fitonias estén en la calle, deberemos protegerlas de la luz directa del sol en sus horas más fuertes, puesto que sus hojas se dañarán. Como os decíamos, necesitan mucha humedad, por lo que también es una planta ideal para los terrarios. En invierno será suficiente con regarlas una vez a la semana, pero en verano el riego será casi diario. No es bueno dejar que se seque la tierra entre riego y riego. Para favorecer un alto grado de humedad, es recomendable pulverizar agua sobre sus hojas (a diario en verano y un par de veces a la semana en invierno). Son plantas que se pueden dividir muy bien, podemos separar sus tallos y raíces con cuidado, seleccionando la parte que necesitemos para nuestro diseño. El resto, lo dejaremos en la maceta original, bien cubierto de tierra y no sufrirá daño alguno. Las fitonias se encuentran en los viveros, en la zona de plantas de interior. Tienen una gran variedad de colores, tanto en las hojas como en sus nervaduras, proporcionarán contraste y frondosidad de modo sencillo a tus mini jardines o terrarios. Es un must have en los jardines de hadas. ¡No dudes en contar con ellas!